Disfruta de la brisa nocturna que refresca y te inspira. Del sol del mediodía que da cobijo a una sombra con alegría. Del brindis con cervezas en un mostrador de chapa mientras suman la cuenta con tizas de pizarra.
Disfruta de cada día desde el minuto uno que abres los ojos, hasta el último en el que los cierras para soñar. Disfruta por ver el vaso siempre medio lleno. De ser optimista y poner una sonrisa a los malos días.
Disfruta porque la vida está hecha de pequeñas cosas y las más importantes te esperan en donde menos te las imaginas.
No la busques, simplemente disfruta.
LUNA DE PARASCEVE